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S'estan mostrant les entrades d'aquesta data: abril, 2009

El Invierno Supremo

“Mucho he viajado (Odín), mucho he indagado, mucho a los hombres pregunté, ¿quiénes se salvarán cuando el Fimbulvetr (Invierno Supremo) llegue a los hombres? (Vafthrudnismal o Discurso de Vafthrúdnir). Así testimonian las antiguas Eddas el recuerdo de los tiempos gélidos, que deberán volver cíclicamente. Y profetiza sobre los supervivientes: “Lif (Vida) y Lífthrasir (Colmado de vida), habrán de ocultarse en el bosque de Hoddmímir (Mímir del tesoro: el fresno Yggdrasil), el rocío matutino comerán sólamente, y engendrarán a los hombres todos ”(44, 45). El fin del verano, antes que un otoño fugaz se transformara en un invierno semestral, era el momento de buscar refugio en la sede del clan o la tribu para la llegada del no tiempo, el año nocturno. Un indio pawnee de norteamérica narró un antiguo mito (Mircea Elíade) que recuerda los años extremos de las gélidas glaciaciones, hace unos 20.000 años: “Antes de que el mundo existiera nosotros estábamos dentro de la tierra. La madre Cereal pro

Fábula

Vino la guerra entre los leones y los demás animales. Como los leones dormían, las leonas eligieron jefe. Decidieron que el ser más temible era una rata. La nombraron general. Vino la guerra, y los burros eligieron jefe al más hábil, el mejor ladrón. Los caballos advirtieron del natural egoísmo y astucia del felino, pero los burros, asnos y mulos, eran más. El gato fue nombrado general. El gato se comió a la rata. Las fieles leonas se sometieron al gato. Y, con ellas de su parte, el gato sometió a los burros. Cuando los leones despertaron, y se vieron esclavos de un gato, preguntaron a las leonas. Éstas, avergonzadas, dijeron: Una voz del cielo nos dijo: ¡Que mande el gato! ¿Qué vamos a hacer, si lo quiere el cielo? Comérnoslo- dijo un león. Yam- asintieron los demás leones. ¡No! Rugieron las leonas protegiendo al gato como a un cachorro... Desde entonces las leonas, los leones y los burros trabajan para los gatos. Maguer ser adivinanza y embrollatestas, a solicitud del jefe de la mana